El satélite Copérnicus nos aportará unos datos más precisos sobre los problemas medioambientales que tenemos que gestionar en La Tierra
Eran las 4 menos 10 de esta madrugada en la Guayana Francesa y agencia espacial europea podía palparse la tensión Porque por fin tras varios aplazamientos y a bordo del ultimo cohete Vega. El nuevo satélite «Centinel 2C» ponía rumbo al espacio para unirse a la familia de satélites Copérnicus.
Según Ferrán Gascón, responsable de la misión Centinel 2C «El Centinel 2A» y el «Centinel 2B» se lanzaron en 2015 y 2017. El «Centinel 2C» reemplazará al «Centinel 2A» para dar continuidad a la misión»
Una misión que tiene como objetivo principal el monitoreo de La Tierra, y en particular con aplicaciones para la gestión del medioambiente, la seguridad y la gestión de los recursos naturales».
Porque esa visión espacial puede llegar a ser de gran utilidad. Gastón afirma que «Esa visión puede darnos un punto de vista más amplio de los problemas medioambientales que tenemos que gestionar».
En Canarias nos aprovechamos de Copérnicus para ver las calimas, hacer seguimiento de los incendios y por supuesto ayudó mucho durante la erupción de La Palma. El nuevo satélite aportará datos con más resolución.