Los de De la Fuente no empiezan con buen pie. El empate a cero en Sapporo suma un punto, pero no permite más fallos. Argentina y Australia se miden también hoy
A 25 minutos del centro de Sapporo, en medio de la kilométrica avenida de Tsukisamu, los vecinos del barrio de Siroishi se agolpan habitualmente a la entrada del restaurante de ramen Yamaokaya. La tradicional sopa japonesa es muy consumida entre los nipones, pero hoy el local tiene poca concurrencia. Con el termómetro rozando la treintena de grados y más de un 60% de humedad, hay pocos transeúntes en la zona.
Desde la entrada principal del Yamaokaya, se puede observar la cúpula con forma de gigantesco caparazón de tortuga que cubre el césped donde se miden hoy España y Egipto. No en vano, el estadio se llama el Domo de Sapporo.
A unos minutos de las 8:30, con extrema puntualidad japonesa, los himnos nacionales de Egipto y España resuenan entre el solitario graderío del campo. Comienza el fútbol olímpico masculino en un Tokio 2020 totalmente marcado por las restrictivas medidas anti covid que ha implementado el gobierno nipón para la celebración de los Juegos.
España llega a Japón como una de las favoritas para llevarse un oro que no logra desde Barcelona 1992. Encuadrada en el Grupo C, al igual que la laureada Argentina, su primer rival es Egipto.
La selección se ha medido ya ante la anfitriona sobre el césped de Sapporo. Hace menos de una semana, los de De la Fuente firmaron un 1 a 1 contra Japón en un amistoso preparatorio. Inicio cauteloso para una selección que quiere volver a España con medalla.
El arranque del partido
No hay tiempo para más prolegómenos. El colegiado Adham Makhadmeh hace resonar su silbato y comienza el encuentro en Japón. Los de De la Fuente comienzan con el ritual que viene marcando el fútbol de La Roja desde hace años. Las posesiones largas y asfixiantes, tratando de quebrar la integridad defensiva del rival y encontrar el fallo.
Pero el cronómetro corre inexorable y España no genera ocasiones. Ante una Egipto que apenas tiene oportunidades de jugar el balón, la selección opta por la templanza y la paciencia en un partido en el que deberían ser mucho más incisivos.
Mingueza abre la veda tímidamente. Con el minuto 17 sobre el marcador, un centro a la caja de Asensio rematado por el futbolista del Barcelona es atrapado cómodamente por El Shanawy. El cancerbero egipcio se siente cómodo bajo los palos.
Pocos minutos después, Mingueza abandona el campo lesionado. Primera, junto con la torcedura de tobillo de Ceballos en el 42, de las dos bajas claves que ha dejado el cruce contra los norteafricanos.
Mala suerte para el futbolista del Real Madrid, que precisamente unos minutos antes de su lesión había protagonizado la ocasión más clara de la selección con un disparo desde la frontal izquierda que golpeó sobre el poste de la portería egipcia levantando ecos en el graderío vacío del Domo de Sapporo.
El medio tiempo alcanza a los jugadores sin goles y De la Fuente les arenga con su charla del descanso. España no consigue una medalla en fútbol olímpico desde el año 2000, cuando trajo la plata de Sidney, y para superar la fase de grupos hay que quedar entre los dos primeros.
La Roja vuelve del descanso con posesiones largas pero sin demasiadas ocasiones
Pero La Roja sigue sin demasiadas ocasiones claras después de volver al césped. Comienzan los primeros cambios y en el 68 salen Oyarzabal y Asensio para dejar entrar a Rafa Mir y Bryan Gil.
Rafa Mir, pocos minutos después, protagoniza la segunda más clara para España con un remate de cabeza que es atrapado con dificultades por El Shanawy. El guardameta egipcio no ha tenido muchas situaciones de peligro, pero el testarazo de Mir le hace retroceder por detrás de la línea de cal manteniendo a duras penas el balón dentro del campo.
La falta de precisión pasa factura y el partido llega a su fin. El cuarto árbitro marca con el luminoso el tiempo de descuento. Cuatro minutos. Eso es lo que tienen los de De la Fuente para lograr un gol que se atraviesa, y el entrenador comienza a desesperarse. «¡Balón al área!», se le oye gritar con toda claridad desde el área técnica.
Los jugadores obedecen y comienza el bombardeo. Los centros a la caja se suceden uno detrás de otro y Vallejo protagoniza la última clara del partido rematando fuera un balón aéreo asistido por Moncayola.
Pero no hay tiempo para más. El colegiado pita el final del encuentro y la selección se marcha a los vestuarios con un sabor agridulce. Segundo empate en Japón en menos de una semana y, aunque suman un punto, ya no pueden permitirse más fallos teniendo a la albiceleste encuadrada en el mismo grupo.
Argentina se mide este jueves contra Australia y viene crecida después de ganar con su selección absoluta la Copa América. A falta de unas horas para que comience su encuentro, España firma un inicio gris en los Juegos Olímpicos. Pero la calidad del equipo está constatada y también es habitual empezar las fases de grupos con cautela.
Los de De la Fuente se enfrentarán a la selección wallabie el próximo día 25 a las 8:30 hora canaria, encuentro que podrá disfrutarse en Eurosport y Televisión Española.