Múltiples concentraciones por el fallecimiento de Olivia, la niña de 6 años asesinada por su madre este lunes en Gijón. Los actos de homenaje y los mensajes de repulsa se han extendido desde Asturias hasta Segovia donde reside la familia paterna
Decenas de personas y autoridades municipales y autonómicas han expresado la condena unánime por la muerte de la niña Olivia, de seis años, presuntamente a manos de su madre, en una concentración celebrada este miércoles en la Plaza Mayor de Gijón.
Por iniciativa de todos los grupos políticos con representación en el Ayuntamiento, el gobierno local ha celebrado una concentración de repulsa en la que se ha guardado un minuto de silencio y a la que han asistido el vicepresidente del Principado de Asturias, Juan Cofiño, y la consejera de Derechos Sociales y Bienestar, Melania Álvarez, además de la totalidad de los miembros de la Corporación Municipal.
En declaraciones a los periodistas, al finalizar el acto, la alcaldesa, Ana González, ha trasladado «el cariño y la solidaridad» de la ciudadanía a los familiares por «el asesinato de una niña a manos de su madre», lo que «merece una condena unánime».
La consejera de Derechos Sociales también ha condenado los hechos y ha pedido que la Justicia actúe «con toda su fuerza».
Director del colegio de Olivia
El director del colegio Corazón de María, donde la niña iba a clases, Simón Cortina Hevia, quien ha recordado que era una alumna «muy cariñosa e intelectualmente inquieta», ha explicado que el centro ha activado un protocolo para ayudar a sus compañeros de aula a «elaborar el duelo».
Al concluir el minuto de silencio, un pequeño grupo de mujeres ha pedido a gritos la dimisión de la ministra de Igualdad, Irene Montero, por «criminalizar a los hombres».
La madre de Olivia, de 48 años, pasará previsiblemente este miércoles a disposición judicial, han informado fuentes del Tribunal Superior de Justicia de Asturias (TSJA).
Asesinato de la pequeña
Los hechos investigados ocurrieron poco antes de la medianoche del domingo al lunes en un piso situado en el número 71 de la calle Gaspar García Laviana, en el barrio gijonés de El Llano, donde la mujer y su hija vivían desde hacía unos pocos meses.
Tras recibir una llamada en la que se alertaba de la desaparición de ambas, los agentes lograron entrar en el piso, ubicado en la cuarta planta, y encontraron a la niña ya fallecida tendida en la cama junto a su madre.
Al parecer, la mujer indicó que había tomado pastillas y por ello fue evacuada, ya detenida, al hospital Jove de Gijón para su observación a lo largo de la noche, antes de ser trasladada al día siguiente a las dependencias policiales.
El padre de la menor, Eugenio García, que fue alertado en su casa de Segovia por agentes de la policía, se trasladó conmocionado hasta Gijón, donde relató a los periodistas que el pasado viernes había obtenido la custodia tras un proceso que se había prolongado durante cinco años.
La niña se quedó al cargo de la madre el pasado sábado y tenía pensado recogerla ayer, martes, para llevársela a Segovia.