Los inspectores de Salud Pública están en pie de guerra para reclamar mejoras en su trabajo y más medios humanos y materiales
Los inspectores de Salud Pública han iniciado una huelga indefinida en las dos capitales de provincia.
Reclaman mejoras en su trabajo y piden más medios humanos y materiales.
Aseguran que en Canarias hay un inspector por cada 25.000 habitantes, una cifra que se sitúa a la mitad del nivel nacional.
Además, denuncian que no pueden controlar si los locales de ocio nocturno cumplen las normativas contra la COVID-19. El motivo es que abren fuera de su horario laboral y no se cubren las bajas y las vacaciones.
Hoy se han concentrado en Las Palmas de Gran Canaria y Santa Cruz de Tenerife.