La situación del sector primario es cada vez más delicada como consecuencia de la inflación y de otros factores como la sequía y el calor
La inflación también está afectando al sector del olivo en Gran Canaria. En ese sentido, hay productores que cifran el incremento en los costes de producción en un 60 %.
A esto se suma la sequía y los episodios de calor, que este año han provocado una pérdida del 30 % de la cosecha.
Este año algunos productores esperan recoger el 70 % de su cosecha habitual. Eso sí, prometen seguir trabajando para mantener la calidad de un aceite virgen extra ecológico de kilómetro cero.
Inflación en el sector ganadero
Los trabajadores del sector primario han notado un incremento de las materias primas que necesitan para elaborar sus productos. Esto les ha llevado a tener que tomar diversas medidas, ya sea aumentar el precio del producto final del mercado, disminuir su plantilla o producir ellos mismos estas materias.
Este es el caso del dueño de la quesería Plácido, que ha notado cómo el precio de los productos se ha hasta triplicado en menos de un año.
Con 78 años y más de 50 dedicados a la ganadería, ha optado por cultivar él mismo forraje para alimentar a sus animales.
Precisamente para tratar de paliar las consecuencias de la inflación en el sector primario, el Ayuntamiento de Ingenio, en Gran Canaria, destinará algo más de 100.000 euros a una subvención directa para las 90 explotaciones ganaderas del municipio.
Esta ayuda es compatible, además, con la ayuda del Cabildo de Gran Canaria. Los ganaderos tienen serias dificultades para alimentar a sus animales.