El nacimiento de la ciudad tinerfeña se corresponde a hace más de cinco siglos
Una placa de bronce de medio metro de diámetro marca desde este martes en la calle San Agustín, en el municipio tinerfeño de La Laguna, su «punto cero»: el centro de la rosa de los vientos que se oculta en el trazado de la ciudad desde hace cinco siglos.
La inauguración de la placa es uno de los actos centrales del 25 aniversario de la declaración de La Laguna como Ciudad Patrimonio Mundial y en ella se revela la rosa de los vientos que inspiró el trazado fundacional.
Según informa el Ayuntamiento lagunero en una nota, este diseño renacentista se conserva casi intacto a pesar de su longevidad y constituye la base de su valor universal excepcional, origen de los caminos históricos de Tenerife y de la unión con Iberoamérica.
El corazón geométrico de La Laguna
Luis Yeray Gutiérrez, alcalde de la ciudad tinerfeña, destacó que el Punto Cero es un símbolo que recuerda que La Laguna fue el origen de los caminos de Tenerife y que su trazado urbano, sin murallas y adelantado a su tiempo, se convirtió en modelo para ciudades de América.
Por otro lado, Cristóbal de la Rosa, director general de Innovación Cultural e Industrias Creativas del Gobierno de Canarias, afirmó que “la cultura y la identidad nacen de hechos que se transforman en símbolos, y La Laguna se ha consolidado como el único símbolo referente para toda Canarias«.
Por su parte, el concejal de Patrimonio Cultural, Adolfo Cordobés, subrayó que “la instalación de esta placa y la presentación del spot son herramientas de divulgación y orgullo ciudadano. Queremos que cada lagunero y cada visitante pueda reconocer físicamente el corazón geométrico de la ciudad».
La placa del Punto Cero, realizada en bronce por Fundiciones Bronzo, materializa la rosa de los vientos que inspiró el trazado fundacional de la ciudad a finales del siglo XV y permitirá a residentes y visitantes posar sus pies sobre el corazón geométrico de La Laguna, al estilo del Kilómetro Cero de Madrid.


