Noche de reportajes estrena temporada este lunes realizando un recorrido por La Palma tras la erupción de Cumbre Vieja
«Noche de reportajes» se estrena con toda la información sobre la isla tras un año desde el comienzo de la erupción. Así fue como el pasado 19 de septiembre de 2021 la tierra volvía a abrirse en La Palma. Nos demostraba así que, a pesar de ser islas volcánicas, no estamos del todo preparados para actuar ante este tipo de catástrofes. Aun así, la respuesta que se dio en la Isla Bonita no tiene precedentes, según afirman las administraciones al frente de la emergencia volcánica, que la califican como “modélica”.
Fueron tres meses de erupción, la más larga de la que se tiene constancia en La Palma. También la más devastadora en cuanto a daños materiales, que se han cifrado en más de 900 millones de euros. Un año después, unos 600 millones de euros han llegado a la isla en forma de ayudas. De estos, casi 250 millones fueron indemnizaciones del Consorcio de Seguros a quienes perdieron su hogar y lo tenían asegurado.
Para quienes no contaban con este resguardo, desde el Gobierno se les buscó una alternativa habitacional que, doce meses después, aún no ha llegado para todos. Eso implica que algunas familias sigan viviendo en hoteles o en casas de familiares mientras terminan de instalarse las viviendas modulares y se buscan más pisos. Según afirma el presidente canario, Ángel Víctor Torres en el reportaje, nunca antes se habían entregado tantas viviendas en Canarias en un año. Además, este año, todas las entregadas, fueron para La Palma.
La agricultura y el turismo, entre los sectores más afectados
Junto a la vivienda, las ayudas son la otra preocupación en la Isla. A la Oficina de Atención a los Afectados creada por el volcán, llegaron más de 7.000 solicitudes. A pesar de que las ayudas han llegado, no lo hacen con la velocidad que requieren quienes las necesitan.
Una de cal y una de arena para los motores económicos de La Palma. Por un lado, la agricultura tocada de lleno, ya que bajo la lava quedó parte de la zona productiva más importante de La Palma: el plátano. Lo que está influyendo en que los precios de esta fruta se disparen. Por el otro, el turismo, afectado durante la erupción debido a los cierres del aeropuerto y con casi 5.000 camas bloqueadas. De momento, el volcán ha propiciado que las cifras de visitantes en verano hayan sido buenas. Se trata del sector en el que se han depositado más esperanzas para la recuperación económica de la Isla.
El volcán no solo dejó daños materiales y económicos
Esta erupción puso de manifiesto también la importancia de la participación ciudadana, ya que el volcán hizo que la población saliera a la calle a demandar tener voz y voto en la reconstrucción de sus barrios. La creación de Revivir El Valle, por ejemplo, permitió que sus propuestas estén siendo recogidas para elaborar la futura planificación de la zona.
Pero el volcán no solo dejó daños materiales y económicos. No hay que olvidar que La Palma es Reserva Mundial de la Biosfera y que la erupción también afectó a la biodiversidad. En este campo, la recuperación está siendo más rápida de lo esperado y servirá para sentar bases de cómo funcionan la flora y la fauna ante este tipo de situaciones.
Tampoco podemos obviar el daño emocional que produjo a los palmeros. Por ese motivo, también hablamos de los efectos del volcán en la salud. Durante la erupción, se detectó un importante aumento de la demanda de consultas de psiquiatría en la comarca oeste de la isla, la afectada directamente por el proceso eruptivo. Mientras que un año después, son los neumólogos los más solicitados por los efectos de los gases y la ceniza en las vías respiratorias. En este sentido, ya se ha puesto en marcha un estudio que permitirá saber hasta qué punto afectó la erupción en este sentido.