Los empresarios auguran un «otoño complicado» en Canarias

Los empresarios advierten que pude producirse una contracción del turismo en invierno por la inflación y la baja renta de las familias europeas

Informa: Patricia Santana / Andrés Pérez

El presidente de CEOE-Tenerife, Pedro Alfonso, ha augurado este jueves un «otoño complicado» debido al impacto de la inflación. Así, ha pedido «responsabilidad» ante la subida de salarios que solicitan las organizaciones sindicales.

Tras reunirse con el presidente de Canarias, Ángel Víctor Torres, Alfonso ha mostrado el «compromiso» de la patronal por sacar adelante la situación «juntos». Asimismo, ha precisado que «no va a ser fácil» dado que puede haber una contracción del turismo en invierno porque sube la inflación y baja la renta de las familias europeas.

En ese contexto ha apuntado que en este segundo semestre del año habrá que sentarse con los sindicatos para analizar la posible subida de salarios. Afonso ha dejado claro que no pueden llegar al 10,2% que marca el IPC de este mes.

«Si hay recesión o se para la actividad no podemos subir en esas cantidades, necesitamos un tiempo para que converjan productividad e inflación», ha indicado, dado que también hay que «garantizar la sostenibilidad de las empresas».

Mejorar la competitividad en infraestructuras

Alfonso ha dicho también que hay que «mejorar» la competitividad en infraestructuras o en la burocracia y hacer una «apuesta fuerte» para potenciar el comercio con el turista externo a la Unión Europea para generar un «turismo de consumo y cobrarlo en el mismo momento en que están en Canarias».

Ha asumido que ahora mismo hay un «problema doble», tanto de renta disponible como de confianza, por lo que entiende que hay retocar algunas ayudas para ayudar con la cesta de la compra, y dejar pasar un tiempo hasta que el mercado se regule porque con la subida fiscal y la inflación, una persona son un salario de unos 20.000 euros al año, tiene 1.500 euros menos.

«Necesitamos tiempo y confianza», ha destacado, dado que «la situación es complicada» para los trabajadores y también para los empresarios a quienes «no queda otro remedio» que trasladar a los precios el aumento de los costes.

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