Las mascarillas permiten ver la boca de quienes las llevan puestas y permiten la lectura facial
La Fundación canaria para las personas con sordera y sus familias (Funcasor) entregó a la Consejería de Educación del Gobierno de Canarias 750 ‘mascarillas accesibles’. La finalidad es que se distribuyan entre el profesorado de las islas.
La utilidad de estas mascarillas, que en su zona central son de un material transparente y permiten ver la boca de quien las lleva puestas, por lo que facilitan la lectura labial. Por tanto, permite el acceso a la expresión facial por parte de los alumnos con discapacidad auditiva.
En un comunicado, Funcasor recalca que «son muchas las barreras con la que se enfrentan las personas con discapacidad auditiva», a las que se suman, a causa de la pandemia de la covid-19, la obligación de llevar mascarillas.