Según el último Estudio ALADINO sobre alimentación infantil y obesidad, las cifras son alarmantes
El Estudio ALADINO, impulsado desde 2011 por el Observatorio de la Nutrición y la Obesidad de la AESAN, analiza las medidas antropométricas de escolares entre 6 y 9 años en España. Este proyecto forma parte de la iniciativa de Vigilancia de la Obesidad Infantil (COSI) de la Oficina Europea de la Organización Mundial de la Salud (OMS).
En su última edición, participaron 12.678 escolares, representando a la población de esa franja de edad en el país. El objetivo principal es medir la prevalencia del sobrepeso y la obesidad infantil, observar su evolución a lo largo del tiempo y estudiar su relación con factores socioeconómicos vinculados al entorno escolar y familiar.
Resultados principales
El 36,1 % de los escolares analizados presenta exceso de peso, según los resultados del estudio. Entre 2019 y 2023, se registró un ligero descenso de 4,5 puntos porcentuales en esta cifra: 3,1 puntos en sobrepeso y 1,4 en obesidad.
Las tasas más altas de sobrepeso y obesidad se concentran en familias con ingresos brutos inferiores a 18.000 euros anuales. A lo largo de las diferentes ediciones del estudio, el exceso de peso se ha mantenido constante en los hogares de menores ingresos, lo que apunta a una posible cronificación del problema y un aumento de las desigualdades en salud en comparación con los niños de familias con rentas medias y altas.
Más obesidad en niños que en niñas
La obesidad y la obesidad severa siguen siendo más comunes en niños que en niñas. Los datos revelan que el 17,3 % de los niños padece obesidad, frente al 14,3 % de las niñas, mientras que la obesidad severa afecta al 4,8 % de los niños y al 2,4 % de las niñas.
En cuanto al sobrepeso, no se observan diferencias significativas entre sexos. Sin embargo, en los niños de 9 años, tanto el sobrepeso como la obesidad son más prevalentes. En las niñas de esa misma edad, solo la obesidad presenta un aumento.
Entorno familiar
Las tasas de obesidad, sobrepeso y exceso de peso son más altas entre los niños de familias con ingresos brutos inferiores a 18.000 euros anuales. En contraste, las familias con ingresos superiores a 30.000 euros muestran una mayor prevalencia de normopeso, con una diferencia cercana al 18 % respecto a los hogares de renta baja.
En este sentido, las familias de rentas medias y bajas registran las tasas más altas de exceso de peso y obesidad. En el grupo con ingresos más bajos, la situación se ha mantenido prácticamente sin mejoras.
Hábitos alimentarios
Siete de cada diez escolares desayunan todos los días algo más que una bebida, con una mayor proporción de niños (71,3 %) frente a niñas (68,7 %), una diferencia significativa. Menos de la mitad consume fruta a diario, y solo el 23,8 % ingiere verduras todos los días.
El 3,8 % de los escolares toma refrescos azucarados más de tres veces por semana.
En las familias de rentas más bajas, estos hábitos alimentarios presentan diferencias marcadas. El porcentaje de escolares que desayunan a diario es 17 puntos más bajo en comparación con las familias de ingresos altos (61 % vs. 78 %). También hay un menor consumo diario de frutas y verduras, mientras que el consumo de refrescos con azúcar supera en más de 8 veces al de los niños de familias con mayores ingresos (7,8 % vs. 0,9 %), con un consumo más elevado entre los niños (9,9 %).
Actividad física y tiempo frente a las pantallas
Más de siete de cada diez escolares dedica al menos una hora diaria a jugar activamente, con mayor participación de los niños (78,3 %) en comparación con las niñas (76,7 %), especialmente en los más jóvenes.
El 81,8 % de los niños entre 6 y 9 años practica alguna actividad extraescolar durante al menos dos horas semanales, siendo esta cifra más alta entre los niños que entre las niñas. En familias de bajos ingresos, solo el 64,2 % de las niñas realiza actividades físicas fuera del horario escolar, frente al 88,1 % en familias con mayores ingresos.
Tres de cada diez escolares pasan más de dos horas diarias frente a una pantalla. Este porcentaje aumenta al 41,4 % en hogares de menores ingresos, el doble que en familias de mayores recursos (22,8 %). El uso excesivo de pantallas es más común entre los niños (43,7 %) y en el grupo de 9 años (48,3 %).
Cifras alarmantes
Más de un tercio de los niños entre 6 y 9 años en España sufre de exceso de peso. Aunque se observa una leve disminución en esta tendencia, impulsada principalmente por la reducción del sobrepeso en escolares de familias con mayores ingresos, la obesidad presenta un descenso mucho menor. En los hogares con menos recursos, apenas se registran mejoras, lo que sugiere una posible cronificación del exceso de peso en estos niños y un aumento de la desigualdad en salud entre familias vulnerables y las de mayores ingresos.
Aunque la reducción del sobrepeso y la obesidad infantil representa un avance, las cifras siguen siendo alarmantes y las diferencias económicas continúan marcando una brecha importante. El estancamiento en los grupos más desfavorecidos subraya la necesidad de implementar políticas públicas que promuevan una alimentación saludable para toda la población escolar.