El Costa Adeje Tenerife Egatesa sumó sus primeros puntos fuera de casa tras empatar con el RCD Espanyol
La UD Tenerife terminó la tercera jornada logrando sumar por primera vez a domicilio en la temporada tras el 0-0 final en su visita al RCD Espanyol. En un partido marcado por el desempeño físico y la dureza de las pericas, que evitó la fluidez de juego de las canarias y desactivó su capacidad ofensiva, las futbolistas del Costa Adeje Tenerife tuvieron opciones de sentenciar en ocasiones aisladas de la segunda mitad, pero finalmente el reparto de puntos terminó por consolidarse en el marcador.
Tras un comienzo de tanteo tímido por parte de ambos equipos, las tinerfeñas consiguieron mantener la posesión y su juego táctico solo a partir de los primeros quince minutos, tiempo en el que las locales mostraban el peligro de sus contras con la salida en velocidad por bandas.
Sobrepasar el entramado posicional defensiva españolista requería paciencia en el toque y precisión para encontrar los pocos espacios existentes en campo ofensivo. Poco a poco el equipo de Eder Maestre trabajó para encontrar algún hueco, pero sin conseguir generar ocasiones claras.
Sí la tuvo, en la recta final, una siempre activa Arola por las locales, pero Noelia Ramos pudo desbaratar su intento sin muchas complicaciones. Llegaba así el descanso, con dominio del balón para el Costa Adeje Tenerife, pero sin cambios en el luminoso de la Ciudad Deportiva Dani Jarque.
El juego fue mucho más bronco y trabado en la segunda parte
La segunda parte arrancó con un juego mucho más trabado y bronco, que impedía la fluidez en el toque por parte de ningún equipo, aunque las visitantes mantenían el dominio del esférico. La renovación del trío de ataque del Tenerife, con la entrada de Blom, Koko Ange y Mari Jose, más Nina Richard en el centro del campo, les aportó otro aire a partir del ecuador.
Mari Jose dispuso de dos ocasiones para marcar casi consecutivas dentro del área, la segunda de ellas con opción para Blom de convertir el rechace de la guardameta rival Salvador, quien mantuvo su puerta a cero con buenos reflejos.
El Espanyol aguantó bien tras la expulsión de Marta Torrás a diez minutos del final
La expulsión de Marta Torrás por doble amarilla a diez minutos del final pudo haber resultado definitiva, pero las de Sara Monforte supieron como suplir su ausencia manteniendo un desempeño físico sobresaliente, que impidió que la UD Tenerife sacara ventaja de su posición de mayoría.
Ya en el descuento, Mari Jose vería la roja directa por un pisotón involuntario. Tras la pérdida de tiempo que supuso esta acción, el partido se diluyó hasta el pitido final con el 0-0.