Un salto cualitativo para un sector que está pasando una de las peores crisis de los últimos años
Un nuevo centro de sementales de cabra majorera ha abierto sus puertas en Fuerteventura. Un espacio a la vanguardia de las nuevas tecnologías dónde mimar la genética de la raza caprina majorera.
El objetivo es que con la garantía sanitaria se preserve la salud de los ejemplares. Un salto cualitativo para un sector que está pasando una de las peores crisis de los últimos años con el encarecimiento del cereal para alimentar a sus animales y la escasez de ayudas para las ganaderías del archipiélago.
Un nuevo centro de cabra majorera
Durante la última década, la FECAMA (Federación Nacional de Criadores de la Raza Caprina Majorera) y las tres asociaciones que la integran, radicadas en Fuerteventura, Gran Canaria y Tenerife, han impulsado la recuperación. Así como la mejora genética de la raza, contando actualmente con unos 13.000 ejemplares inscritos en el libro genealógico.
Además, han trabajado en la mejora productiva de la leche de cabra, gracias a un trabajo conjunto con las explotaciones ganaderas.
Por su parte, la institución insular ha colaborado con el compromiso por consolidar la población caprina majorera para mejorar y mantener la raza, así como la morfología, la vida útil y la producción de una especie que está en peligro de extinción.