Cinco de los catorce detenidos en Las Palmas de Gran Canaria durante una operación antidroga ingresaron en prisión provisional, mientras el resto quedó en libertad con restricciones
Los vecinos de Arenales, en Las Palmas de Gran Canaria, esperan que la reciente redada policial sirva para intensificar las acciones contra el tráfico de drogas en el barrio. Aseguran que es el principal problema de inseguridad y exigen más presencia policial en sus calles.
La intervención, desarrollada a comienzos de semana, se saldó con 14 personas detenidas. Cinco de ellas ingresaron en prisión provisional, mientras las otras quedaron en libertad con prohibición de salir del país.
Respuesta a las denuncias vecinales
La operación se produjo tras reiteradas denuncias de los residentes, que identifican el menudeo de droga como origen de robos, peleas y conflictos. Los vecinos afirman que la situación genera un clima de inseguridad constante.

Desde el Ayuntamiento confirman que se trabaja para ampliar el circuito de videovigilancia en la zona. El objetivo es prevenir delitos y mejorar la percepción de seguridad en el barrio.
