El Teatro Guimerá acoge este viernes 9 y el sábado 10 de junio ´Contracciones´ una comedia negra en la que las actrices Candela Peña y Pilar Castro ironizan sobre cómo las empresas se inmiscuyen en la vida privada de sus empleados
El Organismo Autónomo de Cultura de Santa Cruz de Tenerife (OAC) presenta este viernes 9 y el sábado 10 de junio a las 20:30 horas en el Teatro Guimerá Contracciones, una comedia negra interpretada por Candela Peña y Pilar Castro en la que las actrices analizan cómo las empresas invaden la intimidad de sus empleados.
Precios entre los 16 y 20 euros
La concejala de Cultura del Ayuntamiento capitalino asegura que «es un auténtico privilegio poder contar con dos de las mejores actrices de la escena española sobre el escenario del Guimerá, desenvolviéndose como solo ellas saben hacerlo en una representación teatral que de desarrolla magistralmente entre la comedia y el drama¨. La edil del área considera que ¨esta inquietante obra consigue que el público no quiera despegarse de su asiento durante todo su desarrollo¨.
Para disfrutar de Contracciones, los espectadores pueden adquirir sus entradas en la taquilla del Guimerá a precios que oscilan entre los 16 y los 20 euros o a través de su página web: www.teatroguimera.es, donde además pueden consultar los descuentos especiales existentes para diferentes colectivos
Sinopsis de la obra
Contracciones explora la invasión creciente de las grandes compañías en la intimidad de sus empleados. Con hábil precisión, se muestra a una mujer en un cargo de poder que entrevista a Emma, de la sección de ventas, acerca de su vida amorosa.
Al principio, hay algo cómico en la definición legalista de la empresa de lo que constituye una relación romántica o sexual. Esto, sin embargo, se convierte en lascivia mórbida cuando la gerente exige detalles íntimos de la aventura de Emma con un colega, Darren.
Las campanas de alarma suenan cuando la relación se prolonga demasiado. El embarazo de Emma conduce a la separación forzada de Darren y la manipulación despiadada de todos los aspectos de su existencia.
A través de Emma se muestra cómo la actitud desafiante ante la injerencia corporativa da paso gradualmente al cumplimiento voluntario por parte de los empleados y cómo estos permiten cada vez más que las empresas se adueñen de ellos en cuerpo y alma.