El vuelo tuvo que desviar al trayecto a Tenerife Sur debido a un altercado protagonizado por una decena de pasajeros en el avión
Los turistas británicos que protagonizaron una trifulca en el vuelo procedente de Liverpool el pasado fin de semana ya han sido expulsados. Su estancia en Tenerife no cumplió ni las 24 horas.
Avisaban los propios controladores aéreos a través de un tuit en el que explicaban que recortaban la maniobra de un avión al Aeropuerto Tenerife Sur, procedente de Liverpool. La razón: una decena de pasajeros ocasionaron problemas.
El portavoz USCA en Canarias, José Luis Feliu, informa que «si piden prioridad para el aterrizaje, se les busca un hueco y se les atiende para que lleguen cuanto antes».
En estos casos, el protocolo tiene que ser rápido y coordinado hasta que la policía los espera en pista. Por desgracia, la tripulación se enfrenta a este tipo de sustanciaciones en más ocasiones de las deseadas.
«La tripulación nos llama; nosotros, desde el centro motor, llamamos a la torres», indica el portavoz de USCA en Canarias.
La ley de seguridad aérea establece que cualquier persona puede actuar si cree que alguien puede suponer una amenaza. Una vez detenido, un juez decide si paga una multa o una pena de prisión. También pueden proceder a la extradición, y que se le juzgue en el país donde está registrada la aerolínea.