El presidente del Cabildo de La Palma, Mariano Hernández Zapata, asegura que la isla vive un proceso de cambio en el que deben participar las administraciones pero también empresarios y ciudadanos
El presidente del Cabildo de La Palma, Mariano Hernández Zapata, ve «responsable y valiente» el borrador del plan de recuperación de la isla impulsado por las administraciones públicas para acometer la reconstrucción tras la erupción volcánica en Cumbre Vieja.
En una reunión celebrada este lunes en el Museo Arqueológico Benahorita con los vecinos afectados, el presidente del Cabildo explicó que La Palma «vive un proceso de cambio en el que todos los sectores, desde la administración pública, hasta el sector empresarial, hasta la ciudadanía, deben ser sujetos activos del cambio».
«Proyectar una nueva idea de la isla»
Dijo que se ha abierto una etapa «en la que se debe proyectar una nueva idea de isla que no mire al futuro sino que lo alcance y lo materialice». En ese sentido, se quiere «ofrecer oportunidades para todos y planificar, de manera valiente y responsable, un nuevo modelo para La Palma».
Añadió que la finalidad del plan «es conjugar la esencia y tradición con una realidad moderna». Una realidad «que ayude a abrazar los objetivos del año 2030 y ubique a la isla en una posición ventajosa y atractiva para atraer y fijar a la población».
A la reunión acudieron representantes de las asociaciones de vecinos de El Remo, La Bombilla, Las Manchas, de Timaba (Todoque) y La Laguna-Tajuya. También la Asociación Social Volcán Cumbre Vieja y la Asociación Plataforma Afectados por la Erupción del Volcán Cumbre Vieja 2021.
Tres pilares del plan
Los tres pilares del plan de recuperación son la atención de las personas damnificadas, la puesta en marcha de nuevas infraestructuras y la reactivación de la actividad económica y social.
Respecto a la atención de las personas, se plantean medidas para ayudar a los damnificados a recuperar su vida cuanto antes. También que a la vez, puedan desarrollarse de manera autónoma en los distintos ámbitos de la sociedad.
En esta línea, también se ponen sobre la mesa demandas como la continuidad del reparto de viviendas a las personas afectadas. A eso se añaden ayudas para segundas viviendas, viviendas vacacionales, cuartos de apero y bodegas. También la compra de suelo público en el Valle de Aridane para paliar la posible especulación. Eso al tiempo que se consiguen suelo para hogares y zonas industriales, entre otros.
En cuanto a las infraestructuras, para el Cabildo es un «tema vital» por lo que supone para la economía y el arraigo. Tras el volcán se hace necesario un plan integral de reposición y reconstrucción de las redes viarias afectadas, así como una nueva red hidráulica que atienda las necesidades de un sector fundamental para la isla como es el primario.
Conectividad terrestre
Algunas de las iniciativas son la creación de un fondo mínimo de 60 millones de euros para recuperar la conectividad vía terrestre. Retirar la lava en las carreteras y accesos bloqueados o la ejecución de la obra del embarcadero de La Bombilla. A ello se une el corredor del Sur para conecta la vía El Remo-La Zamora y la recuperación de la carretera LP-2 así como la carretera de la costa.
Como tercer eje del plan está la reactivación económica y social. Así, además de estimular la ganadería y la agricultura, en especial el cultivo del plátano, uno de los más afectados por la erupción. Hay que desarrollar planes específicos para fomentar y recuperar el turismo en la isla. Eso unido a promover políticas de fijación de la población en el Valle de Aridane y emplear recursos para fomentar el comercio de la zona.
Tampoco hay que olvidar el impulso y finalización de actuaciones históricas, insisten desde el Cabildo. Actuaciones como el Balneario de Fuente Santa o las tareas en materia de educación y formación para reorientar las vocaciones emprendedoras que den dinamismo a la isla.