Kalilou Soukouna es un ejemplo de la crisis migratoria. Con 19 años, tras atravesar el desierto del Sahara, llegó en patera en 2005 a Gran Canaria
Este es el caso de Kalilou Soukouna, que se subió a una patera en 2005 después de atravesar el desierto del Sahara. Una experiencia que no le recomendaría, dice, ni a su peor enemigo.
Kali lleva 19 años en Gran Canaria. Con tan solo 14 años se subió a una patera. Fue una de las primeras personas que se embarcaron en la ruta migratoria por el atlántico Él sobrevivió a la travesía, pero su hermano falleció en el mar en 2017.
«No solo es el frio en altamar en la patera, sino hay muchas cosas atrás. Es una guerra. El agua va entrando y tienes que batallarlo para que el cayuco no se hunda y sacar el agua», comenta kali.
Los migrantes como él emprenden la travesía con un objetivo común: mejorar su calidad de vida. Lleva años vinculado al sector primario. Pero hace poco que emprendió su propio negocio en el municipio grancanario de Telde.
La migración es un drama que va mucho más allá de la llegada de cayucos. Detrás de cada persona que llega a Canarias hay una historia diferente. Para dar una calidad de vida a su familia miles de personas se juegan la vida cada año tratando de llegar a Canarias en la ruta migratoria marítima. Kali afirma que hecha de menos a su familia pero ha logrado construir su hogar en Canarias.