PEVOLCA coincide con la actividad “anómala” del Teide
Itahiza Domínguez, director del IGN, destaca el papel de la vigilancia volcánica en Canarias para salvar vidas en una erupción
Este viernes el director del Instituto Geográfico Nacional (IGN), Itahiza Domínguez, ha mantenido en el programa de RTVC ‘Buenos Días Canarias’ que no se dará una erupción en Canarias a corto o medio plazo.
El director ha explicado que el corto y el medio plazo se entiende en vigilancia volcánica a semanas o meses, teniendo en cuanta lo que suelen preceder a las erupciones, como fue en el caso de La Palma en 2021 o El Hierro en 2011, donde sí hubo una intrusión magmática. Asimismo, ha explicado que en estos momentos no han observado intrusión magmática, pero sí cambios en el sistema volcánico de Tenerife.
Con todo, Domínguez explica que habría que esperar a una crisis más intensa para saber que la erupción se produciría de una manera más inminente. En el caso de la isla de Tenerife, ha señalado que es más probable una erupción en donde se han dado las erupciones históricas, pero que dar un punto exacto es prácticamente imposible: «Si no podemos dar una ventana temporal, menos aún una zona. Lo bueno de esto es que se podrá acotar en el momento de una intrusión magmática».
Vigilancia volcánica
Las reuniones mantenidas esta semana por los expertos del Comité Científico de Evaluación y Seguimiento de Fenómenos Volcánicos (CCES) responde a actualizar la información de 2016, pero no significa que el Teide vaya a erupcionar a corto o medio plazo.
Los científicos y científicas esperan que los síntomas de esa posible erupción sean lo suficientemente notables para emprender acciones de prevención. El Cabildo de Tenerife ya cuenta con un mapa de riesgo para una erupción que se pueda producir a largo plazo y en estos momentos se está trabajando en un mapa que pueda servir de guía llegado el momento de una erupción inminente para saber, por ejemplo, el alcance que tendría una cola de lava.
El director señala que la realidad es que sí habrá una erupción en el futuro, pero que pueden pasar 50 años. Es por esta razón que ha recalcado la importancia de la vigilancia volcánica: «Hay que saber vivir con los volcanes y educar a la población. No podemos evitarlo, pero sí protegernos, sobre todo la vida de las personas».