Con el verano y las vacaciones aumentan los ahogamientos. Detrás de estos sucesos suelen estar las imprudencias como principal factor de riesgo
Detrás de la mayoría de ahogamientos se esconden decisiones imprudentes como lanzarse de cabeza, el consumo de alcohol o bañarse con bandera roja. Para evitar sustos es fundamental seguir las instrucciones, acudir a zonas de baño con socorrista y dentro del agua situarnos en lugares donde se hace pie. Un error habitual que puede acabar en tragedia es el de perder de vista un solo segundo a un menor.
En caso de presenciar un ahogamiento antes de lanzarse a socorrer a otra persona, primero hay que llamar a los servicios de emergencia o valorar el estado de la mar.
Durante 2020, fallecieron en Canarias 43 personas por accidentes acuáticos el doble que los de tráfico.