La antigua sede de la Tesorería de la Seguridad social en las Palmas de Gran Canaria se convertirá en un centro sociosanitario para personas con problemas de salud mental, mayores y dependientes
El Cabildo de Gran Canaria prevé inaugurar en 2024 un nuevo centro para personas con problemas de salud mental, mayores, dependientes y con discapacidad intelectual que tendrá 62 plazas residenciales en viviendas tuteladas y 40 de día y supondrá una inversión de 9,8 millones de euros.
Esta nueva infraestructura sociosanitaria se incluirá en las 700 plazas y los 70 millones de euros invertidos por este concepto en Las Palmas de Gran Canaria en virtud del plan vigente, «el más ambicioso y efectivo» que ha habido en la isla, y cuyo grado de ejecución es del 75 %, ha resaltado el presidente de la corporación insular, Antonio Morales.
Morales ha subrayado que este plan sociosanitario supondrá multiplicar por dos las plazas que existían cuando comenzó a gobernar el actual equipo de gobierno, hasta elevarlas a 1.560 tras una inversión global de 30 millones de euros, que se financiarán en un 75 % con fondos de la corporación insular y en un 35 % con partidas del Gobierno regional.
Antigua Tesorería de la Seguridad Social
El nuevo edificio sociosanitario, que se estima que comience a construirse en 2023 y que pueda abrir sus puertas 18 meses después, previsiblemente, antes de que finalice 2024, en Las Palmas de Gran Canaria, concretamente en la calle León y Castillo, frente a la sede de la Cámara de Comercio de la isla.
Se trata de un inmueble en desuso que ha cedido por veinte años a la institución insular el Ejecutivo central y en el que se ubicó en su día la Tesorería de la Seguridad Social, ha explicado el delegado del Gobierno en Canarias, Anselmo Pestana.
Los trámites de este proyecto los inició su antecesor, Juan Salvador León, según ha recordado, al tiempo que ha agradecido que esta colaboración entre instituciones vaya a servir para dar un salto cualitativo en los servicios que ofrece el IASS a la ciudadanía grancanaria.
Pestana ha destacado que el Cabildo de Gran Canaria ya tiene redactado el proyecto a ejecutar en este edificio y la consejera insular de Política Social, Isabel Mena, ha asegurado que la protección parcial que tiene la fachada que da a la calle Pedro de Vera no reviste un excesivo problema para acometer las obras que se precisan.
Mena ha subrayado que las seis personas que ocuparán cada una de estas viviendas tuteladas serán mayores, en la última planta, o personas que, pese a su dependencia o discapacidad intelectual, pueden llevar una vida normalizada, a lo que les ayudará residir en una zona céntrica con muchos servicios a su alcance.
Emergencia social
Preguntada por si estas nuevas infraestructuras sociosanitarias contribuirán a paliar los problemas que se originan en los servicios de urgencia hospitalarios, donde hay personas dadas de alta que permanecen en ellos sine die por diversos motivos, entre ellos porque nadie se hace cargo de ellas, Mena ha precisado que se ejecutan «para paliar una necesidad real, dar respuesta a las personas con discapacidad intelectual, que no se cubre desde hace muchísimo tiempo».
«Otra cuestión es lo que ocurre en las urgencias. Nosotros atendemos a las personas dependientes, las personas dependientes que están es una situación de emergencia social en los hospitales son atendidas ya por el Cabildo de Gran Canaria. Un 30% de las personas que ingresaron en 2021 en centros sociosanitarios provenían de las urgencias sanitarias», ha referido.
La consejera ha dicho que un problema distinto es el que sufren las personas que están en las urgencias sanitarias y no cumplen los criterios de emergencia social para entrar en las residencias, para quienes el Gobierno canario ha aprobado esta legislatura, con mucho acierto, a su juicio, una orden conjunta por la que Derechos Sociales y Sanidad van a garantizar, con la construcción de las llamadas camas de tránsito, que se pueda dar respuesta a estas personas.
«Creo que es importante no mezclar los dos asuntos porque si la puerta de entrada al sistema de la dependencia son las urgencias sanitarias, colapsaremos las dos cosas a la vez. Lo responsable es separarlas porque hay gente en casa esperando recibir una llamada para poder entrar en un centro sociosanitario», ha aseverado.