El panorama favorable lo aprovecharon los canarios poco después al dirigir Pejiño hacia la portería el balón procedente de un remate en semifallo de Christian Rivera
Dos goles de Pejiño le dieron la victoria a la UD Las Palmas ante el Fuenlabrada (1-2). Esto en un enfrentamiento donde los madrileños tuvieron trascendentales errores puntuales que les costaron caros.
Afrontaban los locales el duelo convencidos de que, esta vez sí, cortarían una racha sin ganar en casa que databa del 26 de septiembre. Y quizás fruto de esa confianza se adelantaron muy pronto cuando Feuillassier filtró un gran pase entre líneas desde el balcón del área. Momento en el que Garcés sorprendió con un impacto de primeras.
La situación era propicia para dejar tocado al rival. Tras unos minutos de asimilación, este comenzó a encontrarse cómodo. Ayudaron a ello los destellos de Jesé. El atacante se encontró primero con el lateral de la red. Luego sirvió un pase atrás que no tuvo rematador. Finalmente puso un centro medido que acabó dentro. La diana fue anulada por fuera de juego previo.
Eran demasiados avisos como para creer que la igualada no estaba en disposición de llegar. Acabó firmándola Pejiño con un zapatazo desde la frontal, tras recorte a Ciss, candidato a mejor gol de la jornada.
El revés volvió a despertar al anfitrión. Este puso a prueba al arquero con un tiro lejano de Mula y remató de cabeza al larguero en el córner resultante del desvío por medio de Ciss. Ninguna de esas dos oportunidades fue tan clara como la que tuvo el propio Mula al fallar un penalti cometido sobre Nteka.
Llegó el descanso y tras el mismo volvieron a amenazar los fuenlabreños en un cabezazo de Nteka en el primer palo que tocó el portero. Entró entonces el cara a cara en una fase de relajación hasta que, mediada la segunda mitad, Pathé Ciss recibió una nueva amonestación para sumar su segunda expulsión en cuatro partidos.
El panorama favorable lo aprovecharon los canarios poco después al dirigir Pejiño hacia la portería el balón procedente de un remate en semifallo de Christian Rivera. A partir de ese momento solo Juanma, en un golpeo de falta, acarició el empate.