Un 20% de la población de Canarias, unas 350.000 personas, se resiste, duda o posterga su vacunación contra la covid-19, cuando no la rechaza de plano. Una situación que preocupa a las autoridades sanitarias
Las autoridades sanitarias temen un parón en la campaña de inmunización. De hecho, ya se está notando en el ritmo de vacunación. Hay capacidad para inocular unas 25.000 dosis al día, y sin embargo en los últimos días se ha ralentizado a 15.000-16.000 diarias por una caída de la demanda.
De esos 350.000 canarios que no han recibido ninguna dosis ni han concertado cita, 45.000 pertenecen al grupo de edad entre 50 y 59 años; 63.000 al de 40 a 49 años; 71.000 al de 30 a 39 años; 64.000 al de 20 a 29 años, y 64.000 al de 12 a 19 años, detallan a Efe fuentes de la Consejería de Sanidad.
Además, hay otras 24.964 personas contactadas que no se han vacunado por diversos motivos, como alguna contraindicación, alergia o por estar infectado en ese momento de covid-19.
Sanidad espera que repunte el ritmo
Pero «el verdadero problema», admiten desde Sanidad, es ese 20% de gente que bien no se quiere vacunar o lo está retrasando «por las vacaciones, porque no lo ve imprescindible, o porque alberga dudas o tiene miedo a los efectos secundarios».
Sanidad valora que la cifra de inmunizados haya rebasado, según la última actualización, el 66% de la población y cada vez esté más cerca el umbral del 70%, así como que el 80% de los canarios residentes haya recibido alguna dosis, pero «necesitamos más», señalan las fuentes.
Días atrás, el Gobierno de Canarias anunció una campaña de envíos masivos de SMS fara facilitarles una cita a las personas que no la habían solicitado.
El siguiente paso es que sanitarios las llamarán directamente para tratar de convencerlas y para aclarar dudas, si las hubiera.
En la Consejería de Sanidad esperan que sean más los indecisos que los negacionistas y que a principios de septiembre repunte el ritmo de las vacunaciones, una vez acaben las vacaciones de verano.