La ministra de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana, Raquel Sánchez, ha anunciado el fin de la obligatoriedad de las mascarillas en los aeropuertos. Además, se elimina la toma de temperatura y el mantenimiento de distancia en los controles
La ministra de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana, Raquel Sánchez, ha anunciado este jueves en el Congreso de los Diputados el fin de la obligatoriedad de las mascarillas en los aeropuertos. Además, ya no será obligatoria la toma de temperatura ni el mantenimiento de distancia en los controles.
Durante la defensa del decreto ley de medidas de sostenibilidad económica en el ámbito del transporte, así como de medidas de ahorro, eficiencia energética y de reducción de la dependencia energética del gas natural, la ministra anunció que «ante la evolución de la emergencia sanitaria provocada por la Covid 19» se eliminará la obligatoriedad de la aplicación de las directrices de operación vinculadas con la pandemia en los aeropuertos.
Se establece, por tanto, como recomendación y no como obligación, el uso de mascarilla, la toma de temperatura y la distancia en filas entre los pasajeros en los controles.
«Con esta modificación seguimos los pasos de los países de nuestro entorno, eliminando trabas y, por tanto, potenciando la competitividad del sector del transporte y del turismo», explicó.
Las medidas fueron adoptadas hace meses por la Agencia Europea para la Seguridad Aérea (Aesa) y por el Centro Europeo para la Prevención y el Control de las Enfermedades.
No obstante, estos organismos no abogaron por la eliminación completa de esta directriz, sino que la aconsejan para los viajeros vulnerables, a los que se les aconseja utilizar una FPP2, y en los vuelos que despegan o aterrizan en destinos donde su uso sigue vigente para el transporte público.
Obligatoria dentro de los aviones
Fuentes del Ministerio de Transportes han precisado a Europa Press que las mascarillas seguirán siendo obligatorias a bordo de los aviones, pero no en los aeropuertos, tal y como indica la norma actual.
La utilización obligatoria de la mascarilla se mantiene dentro del transporte. Así, deberán utilizarla todos los pasajeros y personal de los aviones, así como quienes viajen en tren y en autobús.
Deberá utilizarse, además, en los espacios cerrados de buques y embarcaciones en los que no sea posible mantener la distancia de 1,5 metros, salvo en el caso de los camarotes cuando en ellos se encuentren únicamente personas convivientes.
Darias: «estamos en una etapa de final de pandemia»
Hace unos días la ministra de Sanidad, Carolina Darias, aseguraba respecto a la retirada de mascarillas en transporte público que «estamos en una etapa de final de pandemia, aunque con mucha prudencia». Darias subrayó que «si hay un cambio», su Ministerio estará «a lo que digan las personas expertas».
En este sentido, afirmó que la mascarilla «se seguirá usando en los entornos sanitarios y en las residencias, entre los trabajadores y las personas que visiten a familiares, así como en los transportes públicos» porque, aunque «estamos en una etapa de mucha luz», respecto la pandemia no hay que bajar la guardia.
«Ya prácticamente hacemos vida normal y la mascarilla ha sido un elemento protector-barrera muy importante. Siempre hemos ido de la mano de los expertos y así va a seguir siendo», ha afirmado la titular de Sanidad.
Aena podrá revisar los precios de los contratos
Asimismo, también se establece la posibilidad de que Aena pueda realizar una revisión extraordinaria de los precios en sus contratos de obras. El objetivo es «evitar retrasos en las inversiones que está realizando».
El texto también prevé la participación de Aena en la instalación de puestos de control fronterizos automatizados y la contratación del servicio de apoyo para responder a la aplicación del reglamento. Cuestiones «que fortalecerán el control de nuestras fronteras y que permitirá prevenir, detectar e investigar los delitos de terrorismo», según explicó la ministra.