Los líderes de UGT y CCOO en Canarias, Manuel Navarro e Inocencio González, respectivamente, y el vicepresidente de la Confederación Canaria de Empresarios (CCE), Vicente Marrero, se han emplazado este jueves a seguir con el diálogo social que ha dado fruto a la nueva reforma laboral de cara a negociar nuevos convenios colectivos.
Durante una jornada de debate sobre la reforma laboral con los sindicatos organizada por Adecco y la Asociación para el Progreso de la Dirección, tanto sindicatos como patronal afirmaron que tras la entrada en vigor de la reforma laboral, cuya aplicación será ya de obligado cumplimiento a partir del uno de abril, «la negociación empieza ahora».
En este sentido, los líderes sindicales insistieron en la importancia de poner el foco en la negociación de los convenios colectivos, especialmente de aquellos sectores en los que se ha demorado su aprobación o han decaído como consecuencia de la anterior reforma laboral, como en el sector primario y el de los artistas de establecimientos turísticos.
«Tenemos totalmente abandonado al sector agrícola. Tenemos un convenio que hace muchos años que no se toca, ni tampoco sus tablas salariales. Muchos de esos trabajadores solo han mejorado sus salarios gracias a la revisión del salario mínimo», ha enfatizado Manuel Navarro.
Preocupación por los ERTE
El líder de UGT en Canarias se ha mostrado preocupado asimismo por cómo va a afectar la redefinición de los ERTE a las personas que continúan siendo sujetos de esta figura en Canarias. Ha alertado que a partir del 31 de marzo, cuando termina la última prórroga, en Canarias «se pueden perder algunos miles de empleo en el próximo mes».
Manuel Navarro también ha demandado la revisión de los sueldos para adaptarlos al coste de la vida y ha denunciado que en Canarias hay salarios en algunos sectores que son más bajos que a principios de los 2.000.
Además, ha acusado a las empresas de que, hasta la llegada de la reforma laboral, habían «abusado» del contrato por obra y servicio, por lo que ha valorado pasar de más de 40 modelos de contratación a solo seis que prevé la reforma laboral. A su juicio contribuirá a acabar con la temporalidad «como pedía Europa».
Abogan por mantener el diálogo social
En este sentido, el representante de los empresarios, Vicente Marrero, ha defendido que en el contexto anterior la patronal «contrataba en función de la legislación vigente». Ha defendido que ellos también abogaron por reducir la temporalidad y contribuyeron a «cargarse» el contrato de obra y servicio, ya que «no solo fue gobierno y sindicatos».
Así, Marrero ha señalado que el nuevo estatuto de los trabajadores es un «acontecimiento histórico e importante», si bien ahora llega el momento de «concretar la reforma».
Sobre el diálogo social, ha indicado que «es necesario» mantener esa actitud porque, a su juicio, «el país lo necesita».
«Los empresarios no queremos beneficios a toda costa, gobierne quien gobierne. Queremos diálogo social y lo que hemos hecho es un acuerdo histórico», ha esgrimido el representante de la CCE.
La guerra en Ucrania «genera muchas incertidumbres»
Por su parte, el secretario general de CCOO ha destacado que el conflicto bélico entre Rusia y Ucrania «genera muchas incertidumbres» que no les permiten avanzar en ciertos ámbitos, pero ha considerado importante continuar la línea de diálogo, alejada de la reforma laboral «impuesta» de 2012. Cree que lo que consiguió fue abaratar costes salariales y de despido y descompensar la negociación colectiva hacia el lado empresarial.
«Teníamos la obligación de hacer una reforma laboral no impuesta. Se dilató en el tiempo, pero llegamos a un buen acuerdo, aunque la adaptación de esta reforma va a conllevar mucho trabajo para su aplicación efectiva», ha reflexionado Inocencio González.
El líder de CCOO se ha mostrado esperanzado en que se puedan «encontrar los atajos» para que en un tiempo «prudencial» se adapte el mercado de trabajo en un proceso de recuperación productiva que dure lo menos posible.
«Los datos en materia de contratación se ve que tienen un efecto real. Hemos pasado de unas tasas de contratación indefinida previas a la reforma laboral medias de un 11 % a un 21% de media en España. Y aquí en Canarias es aún mayor», ha apuntado González. Ha defendido que esta reforma laboral es «el camino» para tener empresas más sostenibles, con mayor proyección y con menor dependencia de exterior.
Por último, González también ha destacado la necesidad de al menos «hablar» de una reconversión «importante» del sector turístico, si bien ha señalado ser consciente de «no es el momento» porque es el motor económico de Canarias y la economía se avecina de nuevo a una nueva crisis.