Un gol de Robert Lewandowski en el minuto 53 y un penalti al poste de Gerard Moreno instantes después frustraron a la selección española con un empate frente a Polonia (1-1) que mantiene en duda su clasificación para los octavos de final de la Eurocopa, pendiente aún de un triunfo en la última cita
No le bastó el gol de Álvaro Morata al conjunto dirigido por Luis Enrique Martínez, que se adelantó en el minuto 26, pero que observó como de pronto lo empató Lewandowski de cabeza en el inicio del segundo tiempo.
La oportunidad de levantarse le llegó rápido a España y la desaprovechó. Nació de un pisotón de Moder a Gerard Moreno dentro del área, tras haber lanzado un centro sin rematador. Con el VAR entrando de nuevo en escena. El máximo goleador español de la temporada estrellaba su disparo en el poste y Morata regresaba a su versión de fallar lo que un delantero nunca debe perdonar. El rechace, con todo para marcar, no consiguió colocarlo dentro de la portería rival.
Se iniciaba una pelea contra el rival, su dureza y el cronómetro. Los cambios de Luis Enrique aumentaban la verticalidad pero el nerviosismo se iba apoderando del equipo según se acercaba el final.
Szczesny sacaba un disparo cruzado de Morata que se vació en el campo, se peleó con todos buscando el tanto del triunfo que no llegó. Lo tuvo cuando Sarabia le dejó muerto un pase de Jordi Alba y no superó al portero en su mano a mano.
Polonia celebró seguir con vida en el torneo y España, con sabor de derrota, se jugará todo ante Eslovaquia
España, obligada a ganar a Eslovaquia
El 1-1 contra Polonia, el segundo en sus dos partidos en la Eurocopa 2020, obliga a la selección española a ganar en la última jornada a Eslovaquia para poder clasificarse sin depender de nadie para los octavos de final, a los que aún puede avanzar como primera de grupo si ella gana su encuentro y Polonia vence a Suecia.
Es una de las dos combinaciones que le permitiría aún dominar el cuarteto hacia la siguiente ronda. La otra sería un triunfo suyo por más de un gol de diferencia y un empate entre Polonia y Suecia.
Pero en todas las posibilidades que le garantizan la clasificación siempre está la misma premisa: la de su victoria contra Eslovaquia.
En el caso de que España lograra el triunfo y Suecia hiciera lo propio ante Polonia, el equipo entrenado por Luis Enrique debería conformarse con la segunda posición.
Con un empate de España ante Eslovaquia, sus opciones quedan sujetas a otros marcadores. Por un lado, a los puntos que consiga cada tercero de los seis grupos -se clasifican los cuatro mejores-, aunque los tres puntos que tendría parecen a día de hoy cortos para alcanzar un sitio en los octavos de final. Y, por otro, a la necesidad de que Polonia no gane el miércoles a Suecia.
El empate obliga a ganar a España en la última jornada para avanzar a los octavos de final de la Eurocopa sin depender de otros marcadores.