Todas las hipótesis siguen abiertas y se investigan también posibles comunicaciones entre embarcaciones que puedan aportar alguna pista sobre el paradero del padre y las dos menores
Dos semanas se cumplen sin noticias de Anna y Olivia, presuntamente secuestradas por su padre en la isla de Tenerife el pasado día 27 de abril.
Todas las hipótesis siguen abiertas y se investigan también posibles comunicaciones entre embarcaciones que puedan aportar alguna pista sobre el paradero del padre y las dos menores.
A pesar de que todas las embarcaciones están obligadas a llevar un sistema de comunicación, que es el VHF, no todas tienen que tener un sistema de identificación automático y se puede navegar con todos los dispositivos apagados.
La búsqueda se centra en diferentes puntos de Tenerife y también en el extranjero, ya que no se descarta que Tomás Gimeno haya podido huir con las niñas hacia África o hacia algún país latinoamericano o del Caribe.
Sin pistas fiables
Sin embargo, después de dos semanas de búsqueda e investigación no hay pistas fiables sobre este caso que sigue bajo secreto de sumario.
Los investigadores también han centrado sus pesquisas sobre aspectos como los últimos movimientos de Tomás Gimeno el martes 27 de abril, antes de que se le viera por última vez en la Marina de Santa Cruz, de donde zarpó con su barco sobre las 23.30 horas de ese día.
El barco apareció a la mañana siguiente a la deriva frente a las costas de Güímar y desde entonces se busca por mar, tierra y aire a Tomás y las niñas, que debían haber sido devueltas a su madre el 27 de abril a las 21.00 horas.