Los empresarios y trabajadores de la restauración se han concentrado frente a la sede de Presidencia del Gobierno para denunciar la situación en la que quedan tras pasar la isla a nivel 3.
El sector de la restauración de Gran Canaria pide auxilio para hacer compatible su actividad con las restricciones de la pandemia que en nivel 3 obliga a cerrar los espacios interiores.
Varios ayuntamientos de la isla ya están permitiendo el uso de la vía pública para instalar mesas y terrazas.
Los empresarios y trabajadores de la restauración que se han concentrado frente a la sede de Presidencia del Gobierno, en las Palmas de Gran Canaria, para denunciar la situación en la que quedan tras pasar la isla a nivel 3, una situación que solo permite funcionar a las terrazas.
El Cabildo de Gran Canaria ha anunciado nuevas medidas de apoyo para este sector de la restauración y también para los gimnasios, afectados por el paso a nivel 3 ya que se prohíbe la práctica deportiva en el interior de estos establecimientos.
La máxima institución insular estima que las restricciones de la fase tres afectarán a casi 6.000 locales de restauración e instalaciones deportivas. Para compensar las pérdidas económicas de estas pymes, el Cabildo ha anunciado un nuevo paquete de ayudas que asciende a 5 millones de euros que se esperan repartir en dos meses
Asimismo, el Ayuntamiento de Las Palmas de Gran Canaria anunció que ayudará, con exenciones fiscales y permisos para ampliar las zonas de terraza, a los hosteleros de la ciudad cuya actividad esté afectada por las restricciones de la vigente alerta, y a las familias perjudicadas por estas limitaciones.
