Más de mil refugiados ucranianos que han llegado a España huyendo de la guerra ya están acogidos dentro del sistema estatal, que cuenta hasta el momento con más de 12.000 plazas disponibles para atender a estos ciudadanos.
El secretario de Estado de Migraciones, Jesús Perea, ha explicado el plan de recepción y acogida de los refugiados del Gobierno.
«Hemos hecho un gran esfuerzo por redimensionar el sistema de acogida. En este momento, hay más de mil personas en nuestro país acogidas dentro del sistema y estamos preparados para acoger muchas más en la medida en que se pueda producir ese flujo. No hay una cifra exacta ni de capacidades ni de ofrecimientos, pero tenemos la máxima disponibilidad y flexibilidad para hacer crecer la capacidad del sistema», ha asegurado Perea en declaraciones a los medios.
Fuentes de Migraciones han explicado a Efe que esas mil personas están en plazas de acogidas dentro del sistema. Está destinado específicamente a quien carezca de recursos habitacionales, pero que «muchas más» han sido atendidas sin necesidad de tener que ser alojadas.
Se abrirán tres grandes centros en Madrid, Barcelona y Alicante
El secretario de Estado de Migraciones ha advertido de que España se enfrenta a un escenario de desplazamientos masivos y hay que estar preparados. Ha indicado que la apertura de los tres grandes centros de recepción situados en Pozuelo (Madrid), Barcelona y Alicante «va a ser inminente».
Aparte de canalizar la llegada de refugiados y ofrecer una primera alternativa de emergencia, se pretende que en esos centros «se ayude en el trámite documental» que tengan que realizar los ucranianos.
Los refugiados ucranianos podrán acogerse a la directiva de protección temporal que activó la semana pasada la Unión Europea por primera vez desde su creación en 2001. Concede un permiso de residencia inmediata durante un año ampliable a tres, la posibilidad de trabajar y acceso a la educación, asistencia social, atención médica o de otro tipo y medios de subsistencia.
Se regularizarán a los ucranianos que ya estaban en España
El Consejo de Ministros aprobó este martes un acuerdo para implementar la directiva europea de protección temporal y ampliar su ámbito de aplicación. El Gobierno va más allá de lo establecido por Bruselas y España, además de acoger a quienes huyen de la guerra, regularizará a todos los ucranianos que viviesen en España antes de la invasión rusa, ya sea en situación regular o irregular.
«Tenemos un deber un deber moral no sólo con quienes llegan, sino con quienes ya estaban aquí», ha subrayado Perea. Ha remarcado que la comunidad ucraniana está «arraigada» en España: «no es casual una respuesta solidaria de este calibre, los conocemos, hemos tejido lazos de confianza y proyectos con ellos», ha dicho.
Para el secretario de Estado, lo fundamental es aplicar «de manera ágil e inmediata» la directiva porque supone que los ciudadanos van a poder acceder a los mismos derechos que tienen los beneficiarios de protección internacional. «No se trata únicamente de traer personas, se trata de darles una vida en España en tiempo récord», ha añadido.
Habrá 12.000 plazas de acogida
Ha insistido en que se están «dando pasos importantes» para arbitrar un procedimiento «sencillo, rápido y de aplicación inmediata» . Se precisa de coordinación entre ministerios, administraciones autonómicas y locales.
Ha agradecido la disposición de ayuntamientos y comunidades, así como de las entidades que trabajan habitualmente en el marco de la protección internacional porque «han ampliado capacidades en tiempo récord» para disponer de unas 12.000 plazas de acogida.
Perea ha augurado además que España no será un punto de tránsito, sino de destino. Ha abogado por trabajar en futuros programas de acogida a través de redes familiares.
España ayudará en la evacuación de grupos vulnerables
Ha reiterado el ofrecimiento de España de facilitar camas hospitalarias -hay 5.000 disponibles- y ayudar en la evacuación de Ucrania de grupos vulnerables como pueden ser huérfanos o niños enfermos atrapados en ciudades asediadas.
En el acto ha participado el ministro consejero de la Embajada de Ucrania en Madrid, Dmitri Matyushenko, que tras agradecer a España su solidaridad con el pueblo ucraniano, ha apelado al Gobierno «que se pronuncie de manera más clara» en el proceso de integración de Ucrania «en la familia de la Unión Europea».
«No es la hora de pensar, es la hora de actuar», ha aseverado Matyushenko. Ha considerado que representar ahora a Rusia «es un vergüenza». Ha pedido retirar el título a los cónsules honorarios de ese país en Sevilla, Burgos, Valencia, Palma de Mallorca, Vigo y Las Palmas de Gran Canaria.
Por su parte, la secretaría de Estado de Cooperación Internacional, Pilar Cancela, ha explicado que están trabajando en un paquete adicional «significativo y sin precedentes» de ayuda humanitaria. Ha recomendado hacer donaciones en efectivo a ONG presentes en Ucrania para ayudar a la población.
Tras condenar «la acción asesina» de Rusia, el presidente de la FEMP, Abel Caballero, ha destacado que las redes de solidaridad de los municipios españoles están preparadas para apoyar a «un pueblo libre que lucha para seguir siendo libre»: «Ucrania somos todas y todos», ha concluido.
Al término del acto, los intervinientes han guardado cinco minutos de silencio en la puerta de la sede de la FEMP en solidaridad con Ucrania.