La localidad grancanaria dedica este año sus fiestas a la figura de Jesús Arencibia, un artista con una fuerte predilección por San Lorenzo
Las fiestas de San Lorenzo, declaradas de Interés Turístico Regional, están dedicadas a la figura del pintor y muralista canario Jesús Arencibia. Tenía una fuerte predilección por San Lorenzo, y su obra está salpicada de vínculos con la localidad grancanaria.
El cronista oficial de Las Palmas de Gran Canaria, Juan José Laforet, afirma que «tuvo al pueblo de San Lorenzo como un paradigma de la esencia insular». Por su parte, el presidente de las fiestas, José Manuel García, destaca que Arencibia «pintó varias obras relacionadas con San Lorenzo; llegó a hacerlo con el platillo de los pobres».
Además, también llegó a presentar un boceto para un gran mural en la ermita de San Lorenzo.
Decidió descansar en el pueblo para siempre. En el lugar para el que reivindicó una independencia perdida. «En esos años era un tema tabú y él se expresó libremente», apunta José Manuel García. Consideraba que esa independencia era necesaria para que San Lorenzo pudiera resaltar y mantener todo el patrimonio material e inmaterial que había reflejado en su obra.
Lo hizo mientras leía el pregón de las fiestas en los años 70. Unas celebraciones que ahora, en el 30 aniversario de su fallecimiento, recuerdan la figura de uno de los hijos predilectos de Gran Canaria.