De momento se siguen encadenando cientos de terremotos. Con lo cual se espera que la erupción sea inminente. Islandia permanece en estado de emergencia
Islandia sigue en estado de emergencia a la espera de la que podría ser la erupción volcánica más destructiva en medio siglo. Una situación que amenaza con destruir por completo la localidad de Grindavík y que ha dado ya muestras de ser inminente con más de 2.000 terremotos en apenas días.
Túnel de Magma
Los expertos han detectado desde medianoche cerca de 900 seísmos, todos ellos con una magnitud inferior a 3 en la escala de Richter, informa la televisión pública islandesa. Un túnel de magma se extiende bajo la localidad de Grindavík, sin que sea posible predecir cuándo ni por dónde terminará emergiendo.
De hecho, la aparente reducción de la actividad sísmica en la zona –la situación parece estable desde el pasado sábado– es también un indicador de que el magma está cada vez más cerca de la superficie, informa la agencia de noticias Bloomberg.
Grindavik evacuada
Sí se da por hecho, no obstante, que habrá erupción, y todos los parámetros coinciden en que alcanzará niveles catastróficos. Grindavik, donde viven unas 3.600 personas, ha sido evacuada por completo y las autoridades de la isla han cerrado también varias carreteras en la zona para evitar riesgos para la población.
La Policía ha coordinado el acceso de algunos vecinos a la zona este de Grindavik, un pueblo ahora desierto. Se han habilitado varios refugios temporales para los ciudadanos evacuados.