El programa contará con la invitada Yaiza Díaz. La periodista, que sufre cáncer de mama, enseñará a la audiencia su fuerza interior y espíritu luchador ante las adversidades
Vuelve este domingo 14 de julio a Canarias Radio un nuevo episodio de ‘Siempre nos quedará París‘, la cita ineludible para finalizar la semana con optimismo. Desde las 22:00 horas, Rosa Vidal dedicará a sus oyentes dos horas enfocadas en la inteligencia emocional como herramienta para conocerse uno mismo, manejar las emociones y curar el alma siendo la esperanza uno de los elementos clave para sobreponerse ante las adversidades.
«Dicen que más que lo que nos pasa es qué hacemos con aquello que nos sucede en la vida. Nuestra actitud frente cualquier circunstancia determina cómo vamos a vivir esa situación». Así hace alusión Rosa Vidal a la importancia de la actitud ante cualquier golpe que nos da la vida, quien también hará hincapié en aprender a cuidar la energía, los lugares y las personas que se frecuentan o las enseñanzas que se eligen.
En palabras de la periodista y conductora de ‘Siempre nos quedará París’, «la paz interior no puede ser negociada». Es por ello que hay que ser selectivo y observar con atención plena para cuidar de nosotros mismos y alcanzar el equilibrio emocional.
Yaiza Díaz: un ejemplo de esperanza y lucha
Además de la participación de los colaboradores habituales, ‘Siempre nos quedará París’ contará con una invitada cuya historia demostrará a la audiencia cómo ante el peor de los diagnósticos también se puede alcanzar el mayor de los equilibrios. La periodista y compañera de RTVC, Yaiza Díaz, sufre cáncer de mama. En este duro y largo camino que atraviesa no ha dejado de agradecer, crecer e incluso florecer. Su capacidad de lucha y su inquebrantable esperanza son un ejemplo para aquellos y aquellas que se encuentran en la misma situación.
Yaiza Díaz sabe lo que es enfrentarse a las adversidades desde niña. Así lo refleja en su novela «La hija del ciego». En él relata su vida y la de su padre, con discapacidad visual, al igual que dos de sus tíos. Este libro cuenta el recorrido vital de la «hija del ciego», tal y como la llamaban en su barrio en La Laguna (Tenerife), desde su infancia hasta convertirse en periodista. Una profesión que eligió gracias a su padre, pues desde niña le describía todo aquello que veía y le contaba historias para acercarle a su mundo.