El programa de la Radio Canaria vuelve a debatir sobre las etapas más difíciles en el amor y cómo las heridas emocionales sin sanar condicionan las relaciones de pareja
Participa en esta segunda parte, entre otros invitados, el científico y neuropsicólogo Quico Rivera

La Radio Canaria se convierte, una semana más, en un espacio de reflexión sobre las relaciones de pareja. El programa ‘Siempre nos quedará París’, el espacio de Radio Canaria dedicado a la Inteligencia Emocional y presentado por la reconocida periodista Rosa Vidal, retoma este lunes 9 de junio a las 22:00 horas la conversación iniciada la semana anterior sobre la complejidad de las relaciones amorosas y los desafíos que conllevan las crisis.
El programa continúa explorando el dilema de la crisis de las relaciones de pareja y la evolución del amor en la sociedad actual. ¿Ha cambiado la forma en que concebimos las relaciones? Rosa Vidal y su panel de expertos se adentran en estas complejas cuestiones, buscando ofrecer una guía útil para los oyentes.
En esta segunda parte, ‘Siempre nos quedará París’ enriquece su análisis con la incorporación del científico y neuropsicólogo Quico Rivera, quien aportará su perspectiva sobre la parte que tiene que ver con el cerebro, la neurología, la psicología y la inteligencia emocional en las relaciones. El equipo multidisciplinar que acompañará a Rosa Vidal incluirá a José Díaz de la Cruz, psicólogo especialista en Psicoterapia; Abimael Clavijo, psicólogo; Carlos G. Almonacid, experto en Inteligencia Emocional; la doctora Rivero; Chema Blanco, periodista; y Joanne Kirk, empresaria.

Desentrañando las crisis de pareja
El episodio profundizará en cómo las relaciones, a pesar de tener el amor como motor, pueden enfrentar etapas difíciles marcadas por conflictos, distanciamiento o monotonía. Una crisis en las parejas se puede describir como una etapa donde los cimientos de la relación se ven sacudidos, llevando a ambos individuos a un punto de reflexión y, a menudo, de desconcierto. Esta etapa está marcada por conflictos, dudas y una sensación de desapego emocional. No obstante, es crucial entender que la crisis no es el fin del camino, sino un desvío inesperado que puede conducir a un destino más fuerte y significativo. Dicho de otra manera, puede ser una oportunidad para reevaluar la relación, hacer reajustes y elegir entre lo que se tenía antes y lo que se quiere tener a partir de ese momento crítico.
El programa se detendrá en ciertas señales a través de las cuales se puede detectar una crisis. Lo que marca la diferencia entre las relaciones que funcionan y las que sufren los efectos de una crisis de pareja es la capacidad de afrontar las dificultades que surgen en la vida en común. Traspasada la etapa de enamoramiento, empiezan a llegar los primeros problemas más difíciles de superar y hay quienes se plantean si están sufriendo síntomas de desenamoramiento. En las parejas en crisis no hay una visión compartida del problema y existe un sentimiento de culpa hacia la otra parte cuando se comete un error.
Heridas emocionales que condicionan las relaciones
El programa también explorará la visión de la terapeuta y escritora Paula López Espinosa sobre cómo la falta de amor y el predominio del ego se encuentran en la raíz de muchos conflictos emocionales, sociales y espirituales. Las heridas emocionales no sanadas afectan directamente a la salud mental, las relaciones y el bienestar general. La ausencia emocional es el origen de numerosos traumas, comportamientos dañinos y conflictos en la vida adulta.
Las experiencias de abandono, crítica o rechazo en la infancia dejan cicatrices emocionales que, si no se reconocen y sanan, siguen condicionando la vida adulta. Por tanto, es esencial que cada persona se reconcilie con su historia y priorice su amor propio.