El terremoto de magnitud 6,3 también ha dejado 945 heridos
Afganistán continúa las tareas de búsqueda y rescate después de que un terremoto de magnitud 6,3 sacudiera el norte del país la madrugada del pasado lunes, dejando al menos 20 fallecidos y cerca de 1.000 heridos.
Los informes preliminares de la Oficina de Coordinación de Asuntos Humanitarios de las Naciones Unidas (OCHA) en Afganistán indicaron que al menos 20 personas han fallecido —nueve en la provincia de Balkh y once en Samangan— y otras 945 han resultado heridas (616 en Balkh y 329 en Samangan).
La OCHA subrayó que la cifra de víctimas podría aumentar a medida que avancen las evaluaciones en las zonas afectadas.
Hogares destruidos
Según los mismos informes, más de 90 viviendas han quedado destruidas, incluidas más de 50 casas en el distrito de Khulm, en la provincia de Samangan.
Los Comités Provinciales de Gestión de Desastres (PDMC) convocaron reuniones urgentes en las provincias de Balkh y Samangan, mientras que se desplegaron equipos conjuntos de evaluación interinstitucional en los distritos más afectados.
El sismo se registró a la 1:00 de la madrugada, hora local (20:30 GMT) del domingo, con su epicentro a 22 kilómetros de la ciudad de Khulm, en la provincia de Balkh, y a una profundidad de 28 kilómetros, según el Servicio Geológico de Estados Unidos (USGS).
El terremoto se sintió con fuerza en Kabul, capital del país, y en varias provincias del norte y noreste del país, incluidas Balkh, Samangan, Kunduz, Takhar y Bamiyan.
Condolencias en todo el mundo
Mientras, el resto del mundo expresó sus condolencias y ha comenzado a enviar ayuda con cautela. India ha sido la primera en enviar ayuda, con quince toneladas de alimentos y anunciando nuevos envíos de medicinas, mientras Irán y el Reino Unido aseguraron su envío de suministros sobre el terreno.
También se pronunció en las últimas horas el secretario general de las Naciones Unidas, António Guterres, quien expresó su apoyo a las víctimas del terremoto.
“Expreso mi total solidaridad con el pueblo de Afganistán tras el devastador terremoto que golpeó el país. Transmito mis más sinceras condolencias a las familias de las víctimas y deseo una pronta recuperación a los heridos”, publicó en su cuenta oficial de X.
Guterres añadió que el equipo de la ONU en Afganistán está movilizado y que “no escatimará esfuerzos para asistir a quienes lo necesiten en las zonas afectadas”.
Afganistán enfrenta una crisis humanitaria crónica y un sistema sanitario frágil, agravado por el aislamiento internacional bajo el régimen talibán, en el poder desde la caída de Kabul en 2021.
La falta de recursos y la dependencia de la ayuda exterior complican la respuesta a catástrofes en un país asentado sobre la colisión de las placas tectónicas india y euroasiática, una de las zonas más propensas a terremotos del planeta.


