La malnutrición se ha intensificado en África en el último año. A la hambruna se le suman otras enfermedades
La llegada de migrantes a Canarias es constante. Sin embargo, detrás de esa llegada masiva hay numerosas causas que han motivado su viaje. Entre ellas, la emergencia por hambruna que viven en muchos de los países de origen. 193 millones de personas viven en situación de inseguridad alimentaria aguda en 53 países del mundo.
La malnutrición se ha intensificado, sobre todo, en África durante el último año. Al menos 300.000 personas, solo en Somalia, han huido de su país por falta de alimentos. Las ONG que trabajan en el continente africano piden ayuda a los países occidentales.
La misionera en África, María de Lourdes Dopa Brasiño, vive en una congregación en Turkana, Kenia. Cuenta desde allí que en dos años apenas han vivido dos tormentas. Es «un área bastante árida y desértica», dice. La falta de agua produce hambruna. El hambre y la guerra aumentan la inmigración.
María de Lourdes, afirma además que «camina de tres a cuatro kilómetros en los lechos de los ríos secos», por lo que el agua que hay, tampoco es fácilmente accesible.
A la malnutrición se le suman otras enfermedades en algunas zonas del continente africano como el cólera, el sarampión y también la covid. De ahí que la mortalidad infantil crezca de forma preocupante en África.
A este respecto, Jairo González, de Médicos Sin Fronteras, ha explicado en cuanto al trabajo concreto en Somalia que dada «la nueva situación de emergencia, se ha empezado a trabajar mucho más en nutrición y en actividades de agua y saneamiento para atajar los casos de cólera«.
En 2011 ya se registró una gran sequía tras la que más de 260.000 africanos murieron por la falta de alimentos. La situación actualmente ha empeorado y peligra la vida de muchas más personas.
